Comparecieron ante la justicia los presuntos asesinos de un joven en el Ricaurte

IBAGUÉ. Ante el Juez Quinto de Control de Garantías se presentaron de manera voluntaria Cristian Alfonso Oliveros García y Charles Martínez Jiménez, señalados de asesinar el 14 de enero de 2017 a Kevin Stiven Mejía Navarro (foto).
Durante la audiencia, el Fiscal 19 Local de la URI les achacó los cargos por homicidio agravado cometido contra el adolescente de 16 años en el suroccidente de Ibagué.

Hechos. Para ese día, el occiso estaba con su amigo Jhoan Stiven Cortaza Cortaza en una esquina del barrio Cerro Gordo. Salieron a la cancha del Danubio y se dieron una vuelta por el barrio Ricaurte hacia las 11:00 de la noche.
En ese sector vieron a ‘Cristian’ y ‘Charles’, que siempre andan juntos y con quienes Jhoan Stiven había tenido inconvenientes dos años atrás, sobre todo con el primero de ellos, en medio de borracheras. En esa época le sacó un cuchillo y lo amenazó de muerte, además al parecer le dijo que “algún día lo vería solo”.
El día del ataque, al ver los dos hombres, Kevin le pidió a su amigo que regresaran al barrio Venecia para evitar problemas. Ese día llovió fuerte y luego del aguacero el menor de edad y su conocido pasaron por las canchas del barrio Villa Ricaurte, llegaron a la USI del Sur y finalmente escamparon en una tienda donde estaba ‘Charles’ y ‘Cristian’.
Señaló el delegado de la Fiscalía que ‘Charles’ gritó: “¿Qué, cómo estamos nosotros?”, y sin vacilar sacó un cuchillo mediano que tenía en la pretina del pantalón y le pegó una puñalada a Kevin, quien caminó unos metros y cayó al suelo.
El occiso tenía un machete que le entregó a su amigo Jhoan antes de desplomarse.
Jhoan se defendió de ‘Charles’ quien lo apuñaló en el costado izquierdo del tórax y su brazo izquierdo.
No obstante, en la riña Jhoan también hirió en el lado izquierdo de la cara a ‘Charles’, quien fue auxiliado por su amigo ‘Cristian’, que siempre lo protegió con un palo, y juntos huyeron del lugar.
Jhoan auxilió a Kevin, lo subió a un taxi y fueron a la USI del Sur, donde estaban sus ‘enemigos’, por lo que pidió que los llevaran al Hospital San Francisco, donde luego informaron que el adolescente no tenía signos vitales.

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