CHAPARRAL. La angustia y zozobra para una familia chaparraluna terminó tras hallar a su ser querido, sin embargo, la aparición no fue como la esperaban.
Historia. El pasado lunes José Luis Devia Castro salió en su motocicleta en horas de la noche del centro poblado de la ‘Tierra de Grandes’ hacia una finca en la vereda ‘La Cimarrona’, pero nunca llegó allí.
Desde ese momento su compañera sentimental identificada como Yicenia Pérez, junto a otros familiares, reportaron la desaparición e iniciaron su búsqueda.
Al parecer, fue a la altura del puente Santana donde Devia Castro se accidentó y cayó al río Amoyá, pues según versiones, en el sitio había evidencias como huellas de las llantas del rodante. Sin embargo, él ni su moto aparecieron.
Día a día los parientes de José Luis se levantaban con la esperanza de encontrarlo y junto con seis unidades de Bomberos de Chaparral en una móvil del Ejército Nacional continuaron el registro por toda la zona donde pasa el afluente.
Pero fue hasta el miércoles en la tarde, cuando un bloque de búsqueda conformado por los bomberiles y seres queridos, quienes luego de recorrer por cuatro horas desde el sector conocido como La López hasta la vereda Guayabal del corregimiento El Limón, encontraron el cadáver flotando.
Los restos mortales solo llevaban un jean, correa café y una media.
De inmediato y con ayuda de sus allegados recuperaron el cuerpo sin vida, lo sacaron del río Amoyá y lo trasladaron hasta la morgue de la ‘Tierra de Presidentes’.
La Policía asumió la investigación para establecer la verdadera causa de la muerte de Devia Castro, aunque la hipótesis es que se trató de un accidente de tránsito.
Sobre la víctima, se conoció que tenía dos hijos. Estudió en la Institución Educativa Manuel Elkin Patarroyo y en la Tecnológica Fitec, y era natural de Chaparral.
Su cuerpo es velado en la carrera Novena número 5-96 del barrio El Edén, cerca a la iglesia Señor de los Milagros.
