IBAGUÉ. Cuatro años después de intentar asesinar a su esposa, Jakeline Naranjo Álvarez, a quien bañó en bóxer y gasolina, y le prendió fuego, José Gabriel Quiñónez Madrigal fue condenado por la Juez Quinta Penal del Circuito a pasar 21 años, 10 meses y 15 días de prisión.
Los hechos ocurrieron el 31 de agosto de 2009, cuando vivía la pareja en una vivienda de la calle 21 con carrera Octava, luego de una discusión por la cual el sujeto le prendió fuego y lanzó a la mujer por un barranco desde la terraza del segundo piso de la residencia.
Vecinos del sector y familiares de Naranjo Álvarez escucharon sus gritos y la vieron rodando prendida en llamas, intentaron apagar el fuego con tierra y avisaron a la Policía.
La mujer fue llevada al hospital San Francisco, donde ingresó con quemaduras de segundo grado en su cara, cuello, torso y comprometió las vías aéreas, y por la gravedad de sus lesiones fue llevada a un centro asistencial en otra ciudad.
