IBAGUÉ. A sus 14 años de edad aún no son suficientes paa integrar la plantilla de la que José Pekerman tendrá que armar la Selección Colombia, que disputará el Mundial de Brasil 2014.
Sin embargo, el tolimense Julián Camilo Valencia Gallego, sí estará en esta cita orbital portando con orgullo la ‘Tricolor’ Nacional y el ‘Vinotinto y oro’.
Será uno de los abanderados del equipo nacional en el primer cotejo que disputen los ‘Cafeteros’ ante Grecia, premio que obtuvo gracias a la Fundación Colombianitos y Coca Cola, que lo escogieron por ser un ejemplo de tenacidad y bondad, pese a las dificultades que a su corta edad ha tenido que sortear junto a toda su familia.
Víctima de la guerra
“Somos desplazados de la violencia de Villahermosa, Tolima. La guerrilla mató a mi esposo, el papá de Julián y mis otras dos hijas, por eso estamos en Bogotá, viviendo en Ciudad Bolívar e intentando salir adelante”, le contó a Q’HUBO, Olga María Gallego, la madre de Julián Camilo, quien desde su llegada a la capital de República ha pasado las ‘duras y las maduras’ para poder mantener felices a sus hijos, en medio de la carencia de oportunidades.
De su ‘retoño’ menor dice, que “es un niño juicioso, sin vicios, con el talento de fútbol y el dibujo a flor de piel, y con el deseo de ayudar siempre, por eso está en la Fundación Colombianitos y sus profesores lo escogieron para ir a este viaje”.
El gran día
Con la llegada del trofeo de Mundial de la Fifa a Bogotá, el pasado 30 de enero, en el recorrido que hace antes de volver a Brasil para la competición, ‘Juli’ sintió como si aquel galardón fuese suyo, toda vez que ese día su nombre retumbó por todo el estadio El Campín.
“Llevo seis años viviendo en Bogotá y no había conocido nunca el estadio, solo fui ese día y ha sido el mejor de mi vida. No podía creer cuando dijeron mi nombre y que yo iba a ser uno de los que llevaría la bandera de Colombia en el Mundial”, contó el ‘pequeño’ en comunicación telefónica con esta redacción.
Por el momento, y mientras que espera ansioso la fecha en la que viajará al país de la Samba, Valencia Gallego, el villahermosuno a quien la guerra le quitó su tierra y a su padre, agradece a Dios como mejor lo sabe hacer.
“Entrenando a los niños pequeños de mi barrio Bella Flor, cursando el noveno grado de bachillerato y ayudando a mi mamá con una tienda que tenemos para diariamente conseguir el sustento de nuestra casa”, eso es lo que hago con todo mi corazón, concluyó.
ANGÉLICA MAHECHA URIBE
