IBAGUÉ. La madrugada de ayer, siempre la recordarán los habitantes del barrio Galán, ya que de no ser por la alerta de vecinos, una familia habría muerto incinerada al interior de una fábrica de muebles llamada ‘Murillo’.
Cerca de las llamas. A las 4:35 de la mañana el Cuerpo de Bomberos de Ibagué fue alertado de una conflagración de gran magnitud en la manzana D Casa 17 de ese sector. Uno de los propietarios de la empresa, Wilson Murillo Ávila, contó que conoció de la situación cuando su hijo lo llamó y le dijo que se había “prendido” el taller y sintió mucho calor: “Nosotros dormimos aquí con un bebé, con la mujer de mi hijo que también está en embarazo y un nieto”. En total había cinco personas allí.
Sin nada. Los habitantes de la vivienda tan solo tuvieron tiempo de salir sin sacar sus pertenencias. La primera hipótesis que se maneja de las causas del incendio es que se trataría de un cortocircuito.
Pérdidas. Electrodomésticos, herramientas, muebles y otro tipo de pertenencias resultaron calcinadas. Murillo señaló que las pérdidas alcanzan los 50 millones de pesos. “Del taller depende mi hermano, nuestros hijos, mi señora, y hay dos muchachos que nos ayudan, pero ya no pueden volver, porque cómo hacemos”.
Ayuda. Tres móviles de Bomberos llegaron al sitio para calmar las llamas que alcanzaban una altura considerable. Las primeras en llegar fueron las 14 y 15. Por fortuna ninguna persona resultó lesionada.
