IBAGUÉ. Los golpes y las malas palabras hicieron que Luz Adriana Rengifo no aguantara más y denunciara a su compañero sentimental, Jhon Edward Hernández Vivas, quien intentó escapar del Palacio de Justicia donde era judicializado y se lanzó desde una ventana del segundo piso (click aquí para ver el video en nuestra galería).
Rengifo, de 28 años de edad, fue maltratada desde el sábado hasta el lunes, cuando una vecina informó a la Policía.
“El sábado me pegó cachetadas y se fue a eso de las 8 de la noche, y horas después regresó tomado”. indicó.
Aunque Rengifo tenía una medida de protección por agresiones pasadas, ella no manifestó nada porque estaba amenazada de muerte si se quejaba ante las autoridades.
El domingo, ella pensó que no habrían más agresiones, pero ese día no fue la excepción y a la madrugada Hernández Vivas la atacó con un cuchillo. En la audiencia se reveló que el problema del domingo habría sido porque la mujer no quería tener relaciones sexuales con él.
El lunes, sobre las 11:00 de la mañana, el individuo trató mal a su pareja con palabras soeces y nuevamente agarró un cuchillo: “Se lo quité”, afirmó la víctima.
El hombre cogió el machete que tenía en la parte de atrás de la puerta del cuarto y empezó a agredirla.
“Le decía que no me pegara”, añadió. En ese momento llegaron unidades de la Policía a la manzana F casa 3 de La Gaitana.
Uno de los uniformados le quitó el arma a Hernández Vivas.
Las primeras agresiones
La víctima recordó que cuando tenía siete meses de embarazó, “él cogió un cable de parabólica e hizo una trenza de tres y me dejó marcada la espalda. Instauré la denuncia y no hicieron nada”.
Cuando estaban en el barrio San Isidro, la golpeó con patadas y también lo denunció.
“Tuve que seguir viviendo con él porque no tenía recursos y estaba embarazada”, refirió. Además, él le rogaba para que no lo dejara.
Lo denunció
El hombre fue llevado a la Fiscalía y ayer en la mañana en la Sala Dos del segundo piso del Palacio de Justicia, el sujeto fue presentado ante un Juez de Control de Garantías que lo envío a la cárcel, donde no quería regresar.
El procesado, al término de la audiencia, corrió a la ventana y saltó, pero la rápida reacción de los policías evitó que cayera.
