IBAGUÉ. Ferney Tapiero Rozo, de 48 años de edad, fue uno de los civiles que falleció en el siniestro aéreo del Ejército Nacional en Segovia, Antioquia. La víctima era de Rovira, la tierra que lo vio nacer y que hoy lamenta su muerte.
Caso. “Hace 15 días para el año nuevo, estuvo con nosotros en una fiesta , me llevó regalo, le hice tamales. Ese día fue la última vez que lo vi. Él me decía cuídese ‘cuchita’, estaba pendiente de nosotros y era muy especial”, recordó Alba Tapiero, hermana de Ferney, quien perdió la vida el martes a eso de las 9:00 de la mañana, luego de que la aeronave de matrícula EJC 3380 del Ejército se viniera a ‘pique’ con su tripulación.
Hermes Tapiero contó que su hermano “era contratista del Ejército, le hacía mantenimientos a las bombas de inyección de los helicópteros, trabajaba por todo el país, por todas las bases. Llevaba cuatro o cinco años laborando, siempre trabajó en mecánica de aviones”.
Ferney era separado, vivía en Bogotá con sus tres hijos y constantemente visitaba a su familia en el ‘Encanto de Manantiales’.
El lunes fue la última vez que Ferney habló con Hermes, se despidió de él porque haría un viaje de trabajo, pero como sabía que había subienda en el río Magdalena le pidió que una vez llegara de sus labores fueran a pescar.
Al parecer, su cuerpo será sepultado en la Capital de la República.
