Una hora esperando una ambulancia

 

IBAGUÉ. Cuando transitaba el lunes en la tarde por la carrera Segunda sur con calle 12 entre los barrios Combeima y Baltazar, don Marcelino Espítia, reciclador de 64 años de edad, sufrió una fuerte caída que lo dejó inmóvil en unas escaleras del sector.

Ante la mirada de angustia de vecinos y curiosos y la impotencia de la Policía y el Cuerpo de Bomberos de la Estación sur, al no poder hacer mayor cosa para retirarlo del lugar, ya que temían que tuviera una lesión delicada, las personas presentes en el lugar empezaron a llamar a una ambulancia, sobre las 4:20 de la tarde. Entonces, comenzó el calvario para don Seferino.

“Él venía de trabajar. Yo estaba ahí cuando una compañera recicladora me dijo que lo habían encontrado acá. Él fue a la casa, dejó la carretilla, y volvió a subir”; manifestó María Eugenia Ortíz, residente del sector. El adulto mayor, quizás por la caída, se defecó en los pantalones.

Al lugar llegó también la señora Rosmira Romero, quien vive con el adulto mayor: “Él llegó a la casa, se cambió de ropa y salió. No sé si fue que lo empujaron o se cayó”, precisó la señora Romero.

Tras esperar casi una hora, una ambulancia de la Clínica Ibagué aceptó el requerimiento y trasladó al abuelo al Hospital San Francisco para recibir atención especializada, sobre las 5:13 de la tarde.

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