IBAGUÉ. Existe un dicho popular que afirma que “Nadie es profeta en su tierra”. Ese podría ser el lema de vida del futbolista tolimense Cristian Andrés Molano Ospina (con el balón en la foto), quien hace uno año, al ver que no lograba alcanzar su meta de convertirse en profesional en su región, decidió probar suerte en el extranjero. ¡Y lo logró!
Guatemala es el país donde fue a parar este talentoso centro delantero de 20 años de edad formado en las categorías inferiores del Deportes Tolima y la selección prejuvenil del Departamento, con la cual se coronó campeón nacional en el 2005.
Dos años después de dicho título, Cristian hizo parte de la ‘cantera’ del Deportivo Cali. Allá estuvo hasta el 2007, cuando decidió regresar a Ibagué para defender los colores de Comfenalco en el torneo sub 19 creado por la Difútbol.
En el 2008 volvió a disputar el certamen en mención, pero esta vez con el Junior de Barranquilla. Después (2009) vistió de nuevo la ‘casaca’ de la caja de compensación familiar y ahí fue cuando un ‘cazatalentos’ logró ‘exportarlo’ para el balompié guatemalteco.
“Gracias al entrenador colombiano Ever González pude llegar acá. Primero milité en el Antigua GFC, luego me contrató el Zacapa F.C. y ahora hago parte del Club Deportivo Heredia de la primera división”, indicó a Q’HUBO el deportista ‘Pijao’.
Y agregó: “Las cosas me han salido muy bien gracias a Dios. Tanto así que mi representante está muy cerca de concretar un posible traspaso a un club mexicano. Ojalá así sea. Me gustaría acumular más experiencia afuera para luego regresar a mi país. Quisiera algún día jugar con el Deportes Tolima, ya que fue donde arranqué como futbolista”.
Estigmatizado
A pesar de que ahora es querido y respetado, Cristian Andrés Molano Ospina sufrió bastante en su llegada a Guatemala por culpa del estigma que hay sobre el colombiano por culpa del narcotráfico.
“El ingreso a este país fue una pesadilla. Tuve muchos inconvenientes con el personal de inmigración. Prácticamente me rompieron la maleta en el aeropuerto buscando droga. Luego me metieron cuatro horas en un cuarto para interrogarme sobre mi vida. Afortunadamente un directivo del equipo Antigua se dio cuenta de todo y logró sacarme de allá. Será algo que nunca olvidaré”, narró el ariete ‘Pijao’.
Y agregó: “Voy a cumplir dos años aquí y aún no me acostumbro a la cultura y comida. Extraño mucho a mi familia, que es por quienes estoy luchando. Por eso seguiré trabajando fuerte para mejorar cada día más y dejar en alto el nombre de mi país. Quiero demostrar que los colombianos somos gente pujante y muy honrados”.
RONAL RENGIFO ÁLVAREZ