IBAGUÉ. Mientras que Sergio Prieto esperaba al papá para que lo recogiera sobre la avenida del Jordán Segunda Etapa, fue abordado por dos sujetos que lo amenazaron con arma blanca, para que entregara la maleta.
“Uno me puso un cuchillo en el cuello y el otro en el estómago y me decían que si no le daba lo que llevaba me chuzaban”, explicó la víctima.
Luego de pasar el morral donde llevaba un computador portátil, los pillos corrieron hacia la parte interna del barrio, y por llamados de auxilio de Prieto, una patrulla se dio por enterada e inició la persecución.
“Yo cogí detrás de ellos también, y los detuvieron en el parque conocido como ‘La pileta’. La gente también estuvo atenta”, aseguró Prieto.
En el hecho también le fue hurtado el celular avaluado en un millón de pesos, que finalmente fue devuelto. El portátil también fue recuperado, pero lo retuvieron para hacerlo parte de las evidencias.
Entre tanto, María Luisa Martínez, aseveró: “Yo oí el escándalo y salí para saber lo que pasaba y la Policía tenía retenidos a los muchachos”.
Sin identidad. En el momento de la captura, los policías que hicieron parte de la persecución trataron de investigar la identidad de los ‘pillos’, pero estos no tenían documentos y manifestaron ser menores de edad.
Lo anterior obligó a que los dos sujetos fueran trasladados hacia el CAI del barrio Gaitán, confirmar los nombres y edad.
La víctima igualmente fue conducida hacia el lugar para interponer la denuncia y hacer devolución de los elementos.
