IBAGUÉ. Esteven Alfonso López Guzmán, policía oriundo de Ibagué, falleció en Soacha, Cundinamarca, donde fue llevado el sábado anterior luego de resultar herido con un fusil cuando terminaba turno de guardia, según sus familiares, en la finca de Gabriel Camargo, máximo accionista del Deportes Tolima, ubicada en Fusagasugá.
“Parece que fue un accidente. Ya habían terminado turno cuando a un compañero se le cayó el fusil y se disparó. Él mismo lo recogió, le decía que no se fuera a morir porque lo metían a la cárcel, pero se tropezó y se lastimó un brazo”, manifestó Ariel Alfonso López, padre del Policía.
El familiar recuerda que el joven de 18 años estudió tres meses en el Centro Nacional de Operaciones de la Policía, Cenop, En Chicoral y luego fue trasladado a Fusagasugá:
“Estaba contento de ingresar a la Policía, era uno de los mejores alumnos”, dijo el padre.
Y agregó: “Era bachiller del Colegio La Sagrada Familia, quedó campeón con el equipo de fútbol y se ganó una beca para estudiar, pero decidió irse para la Institución. Él murió en lo que le gustaba y amaba, en su ley” puntualizó López.
Por su parte, Darwin López Pinzón, recordó que su sobrino era una persona muy devota, creyente de la Iglesia Cristiana Evangélica: “Era muy sano, deportista, no fumaba, ni tomaba. Por eso resistió las cirugías, porque la bala le afectó cinco órganos y todo está en investigación por la Fiscalía de Cundinamarca ”, indicó el tío.
