IBAGUÉ. Defender a la progenitora de una pelea conyugal, resultó ser una odisea para una chiquilla de siete años edad, que tuvo que ser suturada en diferentes partes de la cara por una aparente agresión de su progenitor.
Según la abuela de la niña, la discusión entre la pareja se presentó por celos, y en medio de la acalorada riña la pequeña se metió y fue empujada por su padre, cayó sobre un tocador al que se le rompieron los vidrios y las esquirlas le afectaron el rostro.
“Ella se fue a defender a la mamá y fue empujada”, explicó la familiar, quien agregó que los hechos se presentaron en el sector de Boquerón.
La niña fue remitida al Hospital del Sur, donde le cogieron nueve puntos en la ceja, cuatro en la frente y tres en la entreceja. “En un inicio estaba muy inflamada y ya se le ve recuperación”, explicó la familiar.
Y agregó: “Los niños no tienen por qué pagar las consecuencias de las peleas de los mayores. Deben tener más cuidado cuando ellos estén presentes”, aseveró la adulta.
La denuncia por violencia intrafamiliar fue recibida en el centro asistencial y la niña fue enviada a evaluación con Medicina Legal para conocer las afectaciones físicas y sicológicas.
