IBAGUÉ. El pasado sábado, Luz Mila Tabares de Sánchez (madre) y Mery Sánchez Tabares (hija), recibieron el mejor regalo de sus vidas. El sábado, las dos lloraron y lloraron, pero de alegría.
“La busqué por cielo y tierra sin lograr mi objetivo. Realmente creía que ya estaba muerta. Creía que la única familia que tenía era mi hija y mis dos nietas”, le dijo a Q´HUBO, Mery Sánchez, quien vive en Ibagué hace 35 años.
La Historia. “Hace 15 días, una vecina vio la nota que publicó Q’HUBO en la cual decía que mi mamá me estaba buscando y no lo podía creer. Sin embargo, con el corazón acelerado, llamé al número que allí decía y efectivamente, encontré esa otra parte de mí que tanto extrañaba, encontré a mi familia”, agregó.
De esta manera, planearon el encuentro para el Puente de Reyes y el sábado, muy temprano, Mery salió de la Capital del Tolima con su nieta mayor rumbo a La Dorada, en Caldas.
“No sé explicar con palabras lo que sentí porque es un sentimiento muy profundo el que me embarga. Recordamos lo que más pudimos (…) tal vez el tiempo nunca nos alcance para contarnos lo que vivimos la una sin la otra”, le dijo Luz Mila a Q’HUBO.
