IBAGUÉ. Una familia que se movilizaba en un carro ayer en la mañana sobre la nueva Variante de Picaleña entre el sitio conocido como El Rodeo y la Glorieta de Payandé se accidentó, pero un milagro los salvó de la muerte. Uno de los ocupantes era un bebé de dos años de edad.
El hecho se registró a la altura del kilómetro 5 más 640 metros a eso de las 8:40 a.m., cuando John Jairo Ávila Campuzano, de 36 años de edad, manejaba el vehículo de placa BKE- 832 con dirección a Bogotá.
El carro quedó sobre el carril subiendo de la doble calzada, luego de que sobrepasara el separador de tierra. Las latas del carro quedaron totalmente retorcidas, por lo que Ávila y su familia tuvo que ser ayudada por las personas que llegaron a atender el accidente.
Los afectados, entre ellos Jazmín Escobar Pereira, de 25 años de edad, Brayan Stiven Ávila Escobar, de 2 años de edad, y Avila Campuzano, fueron llevados en una ambulancia a la Clínica Ibagué.
Una de las cosas que salvó al bebé fue la silla en la que lo llevaban sus padres:
“Algunos vehículos tienen una silla adaptada para menores de 7 años de edad, esté automotor la tenía y estaba bien puesta lo que evitó que el menor no tuviera ningún tipo de lesión”, manifestó el comandante de Policía de Tránsito de Ibagué, capitán Julián Trujillo.
HIPÓTESIS INICIAL
El comandante de la Policía de Tránsito de Ibagué, capitán Julián Trujillo, le dijo a Q’HUBO: “La primera hipótesis es que en el momento del accidente había una superficie, y se podría determinar un posible exceso de velocidad”, expresó.
El oficial le recomendó a los conductores, respetar las señales de tránsito, no sobrepasar los límites de velocidad, y sobre todo, ser muy prudentes en las variantes.
NO OLVIDE: La llanta del lado izquierdo estaba pinchada, por lo que se podría determinar que el accidente se habría originado debido a dicha falla.
