IBAGUÉ. Job Lozano Rubiano salió del barrio Tulio Varón de la capital tolimense con rumbo hacia Ecuador a principios de enero de este año, en busca de mejores oportunidades laborales. El joven se encuentra en la actualidad en una Unidad de Cuidados Intensivos de una población ecuatoriana, luego de ser atacado por unos sujetos.
Su madre, María Nelsy Rubiano, de 48 años de edad, indicó que Job laboraba en una mina de oro en la localidad de Tenguel, donde reside desde enero y un amigo suyo le prestó una motocicleta para que diera una vuelta y conociera la región: “El 13 de julio salió en la moto y por robársela le dieron un golpe fuerte con un tubo en la cabeza y lo tienen en un hospital de Machala”, comentó.
La progenitora agregó que llamó al centro asistencial de la localidad y le informaron que dadas las condiciones críticas de su hijo, no pueden trasladarlo a Colombia: “Además me dicen que no pueden responder más por la droga porque ya llegó hasta un tope. Mi esposo, Alcibiades Lozano, viajó el 15 de julio para allá pero no tiene una posada ni familiares allá”, comentó.
La señora Rubiano, quien llegó a Ibagué en el 2001 bajo condiciones de desplazamiento forzado desde la vereda El Diamante, jurisdicción de Rioblanco, sur del Tolima, pide a los buenos corazones que le ayuden a pasar este momento tan difícil para ella y su familia, ya que pese a tocar las puertas de insitituciones gubernamentales, no ha sido posible obtener los recursos para tener listo el traslado de su hijo apenas mejore su salud:
“Hemos ido a la Gobernación y nos comunicaron con Migración. Nos pidieron fotocopias de los documentos mío y de mi hijo para enviar a Ecuador pero hasta el momento nos dicen que no tienen recursos para repatriar a personas en ese estado. Necesitamos que nos ayuden para trasladarlo a Ibagué”, concluyó.
Mala racha
La semana pasada, medios ecuatorianos registraron el linchamiento de Wilmer Ruiz Vargas, natural de Rovira, quien en circunstancias que son materia de investigación del país vecino, habría asesinado a un ex concejal de la localidad, hecho que provocó la furia de los residentes del sector que lo buscaron para asesinarlo a punta de golpes, palazos y puñaladas.
En otro caso, a mediados de abril, Jesús Antonio Quimbayo Ruiz, también oriundo de Rovira, perdió la vida en aguas del Oceano Pacífico en Guayaquil.
