IBAGUÉ.No tienen poderes telepáticos ni sobrenaturales, como podría señalar alguno de los tantos mitos que se han forjado a través de los años sobre la relación entre gemelos idénticos. Sin embargo, Eliana María y Luis Fernanda Martínez Lara, sí comparten una estrecha unión que las ha guiado por el mismo camino desde que apenas eran unas niñas.
Una de ellas, Eliana, recordó: “Mi papá fue jugador de fútbol profesional y quería que sus hijas también fueran deportistas, pero no futbolistas, entonces junto a mi mamá nos inscribieron a la liga de atletismo y es ese deporte el que nos ha traído hasta aquí”.
Ese lugar referenciado por la atleta, es nada más y nada menos que la Escuela de Cadetes de Policía General Santander, que se convirtió hace pocos meses en el nuevo hogar de estas dos jóvenes ibaguereñas.
Allí llegaron luego de pasar los respectivos exámenes de ingreso y con el ingrediente extra de que son dos experimentadas garrochistas que por el Tolima, dieron lo mejor de sí durante 10 años, alcanzando títulos nacionales e internacionales.
“Estamos aquí porque las dos teníamos este sueño, aunque parece curioso, nos ha gustado lo mismo toda la vida y estar ahora en esta escuela es un sueño más que hemos cumplido”, indicó Luisa Fernanda, que según su hermana ha sido la más inquieta desde niña.
Por ahora, estas dos jóvenes siguen su preparación policial y deportiva, además de dedicarse a enseñar su técnica en los ratos libres, ya que en pocas semanas tendrán la primera competencia interescuelas, donde buscarán un cupo para el campeonato suramericano de escuelas policiales que se desarrollará este año en Perú.
Son economistas
Para seguir con las coincidencias, también hay que decir que Eliana y Luisa se graduaron el año pasado de las misma carrera profesional: Economía.
Según contó Eliana, fue una coincidencia de la vida: “Yo sí quería estudiar esa carrera y por la Ley del Deporte me becaron en la Universidad del Tolima, pero mi hermana quería escoger la de administración de empresas, y lo que ocurrió fue que ese año las niñas de fútbol quedaron campeonas y pues el subsidio fue prioritario para ellas y no quedaron cupos. Sin embargo, gracias a Dios se logró que la Universidad de Ibagué la becara pero en economía y las dos resultamos estudiando lo mismo”.
